Os presento en esta ocasión un rincón de Valdepeñas de Jaén muy conocido por la mayoría de visitantes que se asoman a nuestra sierra. Se trata del paraje de Las Chorreras, un barranco de exhuberante vegetación y belleza sobrecogedra que se encuentra insertado prácticamente dentro del casco urbano de la localidad.
El río que ha horadado este precioso barranco es el Vadillo, que nace a poca distancia en el paraje del mismo nombre, aunque en inviernos lluviosos el nacimiento del río se encuentra más hacia arriba. El Vadillo y las Chorreras son dos lugares de esparcimiento, paseo y contacto con la naturaleza típicos de los valdepeñeros. Sin lugar a dudas son de los sitios más queridos y apreciados por los vecinos, aunque algún desaprensivo se encargue de contaminar el entorno con residuos y basuras de todo tipo. No cuesta nada, después de disfrutar de una charla y unas "bolsas de chucherías" en sus sombras, llevarnos la basura y tirarla en algún contenedor o papelera próxima... Así ayudamos en la conservación de un espacio de gran valor ecológico y podemos disfrutar de su esencia pura en el futuro.
El recorrido que podemos realizar a lo largo de este arroyo es de apenas un kilómetro de longitud desde el parque del Chorrillo hasta el Vadillo. A pesar de ser tan corto el trayecto, seguro que nos atrapan por más tiempo del esperado sus aguas cristalinas, sus pozas, su cascada de 15 metros de altura, su frescor, el susurro de las hojas, como si de un hechizo se tratase... Permítanse pararse a observar sus maravillas, sus pájaros, sus aguas embravecidas, la espesa vegetación que los rodea, su silencio sonoro...no hagan el camino atropellado...disfruten de su esencia...
Para muchos esta última foto les recordará a un simple ratón, pero nada más lejos de la realidad... Esta foto corresponde a un ejemplar del escaso musgaño de Cabrera (Neomys anomalus), una especie de sorícido semiacuático que se alimenta de insectos, que hasta la fecha no se había descubierto en la Sierra Sur de Jaén y que, ahora que sabemos de su existencia en este paraje, tenemos la obligación de conservar. De ahí la importancia de no contaminar estas aguas con nuestros residuos, ya que este animal solo habita en aguas con un alto grado de pureza, convirtiéndose así en un buen bioindicador de la calidad medioambiental de nuestros ríos y arroyos.
Es una delicia poder observar este diminuto y ágil mamífero bucear por los remansos y correr por las frondas de la orilla en busca de los insectos, arácnidos, moluscos y otros animalillos de los que se alimenta. Siempre que lo consigo ver bucear y nadar me viene a la mente el compararlo con los gráciles movimientos de la nutria o el desmán ibérico, salvando las distancias, claro está...
Musgaño de Cabrera (Neomys anomalus)